martes, 24 de marzo de 2009

MADRID-CHINA-ESTOCOLMO

23 de marzo
Desde la bodega ve amanecer otro día por el río Amarillo. Quizá hoy sea mejor. Si consigue un buen barco con algunos turistas a bordo sacara dinero para lo que queda de mes. Si no baja pronto a tierra y toma algo de licor se volverá loco. Sera mejor que ponga rumbo a Zhengzhou cuanto antes. El viento que sopla no le gusta. La vela no aguantaría otro remiendo.

25 de marzo

La suerte, sabe, que no esta de su lado. Pacientemente llega al embarcadero de madrugada, con el frío y la humedad instalados en su cuerpo y acierta a pesar del cansancio a amarrar su barco que mas parece una sombra por como lo mira un farol cercano que oscila movido por el viento y por el lamentable estado que ofrece en comparación a las otras barcazas con las que comparte puerto. No, no tiene suerte pero esta decidido a buscarla y secuestrarla si es preciso.

26 de marzo
El quinto vaso de licor de arroz que traga sin pensar, no le quema como los otros. Este se instala directamente en su cabeza golpeándolo con saña desde dentro. Si toma otro mas igual deja de pensar en Yu-Han y los pequeños que dejo en la casa hace ahora... ¿y porque no? ¡el ultimo!
Las pocas monedas que guarda en un pequeño retazo de tela y que esconde cuidadosamente en alguna parte de su raída vestimenta son las ultimas. Ya no hay mas. Se dirige hacia un almacén del puerto que ya conoce dispuesto a jugarse el dinero y si pierde, el barco y si lo pierde también ira a jugar a la ruleta, apostando su cabeza. A ver si le deja de doler.

29 de marzo
El sol que le quema los labios termina por despertarle. Abre los ojos y siente la sequedad en la boca y la garganta como si hubiera estado comiendo tierra toda la noche. Se incorpora despacio y va notando todos los músculos doloridos de su cuerpo. Dos días jugando y bebiendo han hecho mella en su animo. Camina lentamente hacia su barco dispuesto a navegar hacia su pueblo. Se acabo. Volverá a casa y luchara por un sitio entre los suyos como hicieron su padre antes de el y su abuelo antes de su padre. Con suerte tendrá una vida que dignificaran sus hijos.
- ¡Hu-an!, ¡Hu-an! Espera, para.
Se vuelve al oír su y nombre y ve al guarda del puerto y antiguo amigo suyo que camina rápido hacia el.
- Hu-an, espera hombre. Hay unos turistas que desean alquilar un barco para ir al norte. A ti te pillaría de camino y podrías matarlos cuando quisieras o pedir un rescate por ellos. Son españoles. Nadie los echara de menos en mucho tiempo.
- ¿Como sabes todo eso?
- El cónsul de la ciudad ha venido con ellos y me ha dicho que son gente de dinero que viaja por todo el mundo. Es un matrimonio estúpido que no puede entenderse con nosotros. Tu eres el único que podrás hablar con ellos. Tu estuviste en España trabajando en una casa de comidas. Sera mas fácil de lo que te imaginas. Oh, Hu-an creo que los dioses están contigo.
Hu-an apenas puede creer lo que le dice el guarda del puerto. Por fin un poco de suerte. y siente la urgencia de llegar hasta ellos rápidamente.
- Llevame hasta ellos, Lha-kon.
Cuando llegan a la oficina portuaria, Hu-an descubre a sus pasajeros: una pareja mediterranea de mediana edad embutidos en unos extravagantes ropajes chillones que de lejos indican su nueva posición y su falta de clase. Hu-an sonríe satisfecho y con la intención de agradar a los extranjeros inicia una inclinación respetuosa mientras les saluda diciendo:
- Salud viajeros. Que el sol acompañe vuestro viaje por la tierra de mis antepasados. Mi nombre es Hu-an y estoy a vuestro servicio.
- Fíjate Paqui, se llama Juan como mi primo. Esa es buena gente. Se nota de lejos. Vamos a pasar unos días de puta madre.
- Kevin coño que poco fino eres, hijo.
- Pero ¿que he dicho Paqui? Joder, tengamos las vacaciones en paz.

6 de abril

- Kevin, Kevin. ¿Has visto las braguitas que tenia puestas a secar en la cuerda?

- Yo que voy a ver Paqui. Las tendras puestas.

- Eres tonto Kevin. Si las llevase lo sabria.

- Con lo despistada que tu eres. Acuerdate de...

- Señora por favor no deje colgada su ropa interior en la cuerda de la vela. No queda bien su ropa interna colgando.

- Vamos Juan, no seas bobo. ¿Que daño pueden hacer una bragas colgadas en el barco?

- Señor Jesus, mis antepasados volverian a morir de vergüenza.

- Joder Juan, vergüenza si vieras mis calzoncillos colgando. Me los trajo el Alfredo de Mexico y tienen un bolsillo para sacar el "paquete" en vez de una bragueta. Yo cuando los vi pense que era para poner una foto. Lo malo es que puse la de una amiga que me tire hace tiempo y la Paqui es de las que no perdonan. Estuvo casi un mes sin querer follar conmigo.

- Lo siento por Uds. Es duro no hacer el amor durante tanto tiempo.

- Lo que es duro es que no quisiera follar conmigo. Claro que no dijo nada de follar con otros.

- Señor Jesus, yo tengo las.. las.. esas de su mujer. Yo...

. Ah, cabronazo ya entiendo: por las noches las miras, las hueles, te pones cachondo y te hartas a sobarte el paquete, ¿eh? Por nosotros no te apures, si tienes un apreton baja a tierra y desahogate con cualquier putilla. Tambien nos vendria bien a nosotros.

-¿Ir de putillas señor Jesus? ¿Los dos?

- No jodas, Juan. Digo estirar las piernas. Ademas si le digo a la Paqui que voy de putas es capaz de amargarme el dia.

- ¿Puedo quedarme con las... las... esas?

- Si joder pero no le digas a la Paqui que te las he dado. Hay cosas que las mujeres no entienden. Y por dios, que no te las vea yo puestas Juan.

- No señor Jesus, yo las quiero para Yu-Han. Nunca ha tenido nada asi.

-Pues quedatelas coño. Y no te preocupes las bragas son como el coño: coño lavado, coño estrenado, braga lavada, braga estrenada. Siento que tengan un agujero en el culo pero es que la Paqui me pone muy burro.

(Estas las enviare como señal de que estan vivos cuando pida el rescate. Aunque de seguir asi a estos los mato antes y luego pido el rescate: no hay quien los aguante.)

- Kevin, ¿puedes traerme otras braguitas antes de que se entere todo el rio que no llevo?

- Anda Paqui, baja conmigo y olvidate de las... las... (coño como pongo de pensar en ellas) esas y vamos a jugar al escondite con mi labo.

- ¿Pero que dices Kevin?

- Coño Paqui, hay que ir aprendiendo el idioma.

(Oh ancianos progenitores, dadme fuerzas para aguantar esto. O dadme un trabajo. Aunque sea en España de camarero: yo pago el billete)

11 de abril

Unos días después los acontecimientos se precipitaron. Hu-an cada día mas harto, se propuso poner fin a aquella situación. Su idea era mas o menos la siguiente: Echar el ancla en medio del rio aprovechando que en esa época no había demasiada circulación fluvial debido al mal tiempo. Después contactaría con el consulado español mediante su amigo Lha-kon para pedir un buen rescate por la pareja de turistas que tenia en la barcaza. Y finalmente recogería el dinero (ya vería como) y volvería a su casa para vivir feliz con Yu-Han y su hijos. Y sus padres, su suegra, su cuñada y un sobrino pequeño que siempre le miraba raro. Con el dinero del rescate le pondra gafas. De sol.

- ¡Juan, Juan! ¿Qué pasa con la comida? ¡Y no me digas que tenemos arroz y pescado de río porque con lo que pago deberíamos probar otra cosa.
- Hoy comeremos arroz con carne.
- ¿Desde cuándo tenemos carne?
- Señor Jesús, la he pescado esta misma mañana.
- Juan, la carne no se pesca. Se caza o se mata pero no se pesca. Solo el pescado se pesca. Lo dijo confidio.
- ¿Quién era confidio señor Jesús?
- ¡Coño el chino que lo dijo casi todo!
- No le conozco señor Jesús.
- Joder, Juan que lento eres algunas veces. Fue el que dijo: Debes tener siempre fría la cabeza, caliente el corazón y larga la…
- ¡La mano señor Jesús! Larga la mano. Y no es de confidio sino de Confucio nuestro sabio.
- Confucio, confidio da igual pero no es la mano lo que siempre tienes que tener larga. Mi cuñao “el Alfredo” me dijo que era la…
- ¡La mano señor Jesús! Por favor no nos insulte. Nos roban nuestra cultura, adulteran nuestros mas hermosos frases y vejan a nuestros hombres mas insignes. Mi corazón se siente dolorido por…
- Esto es broma ¿verdad Juan? Yo solo pregunte por la comida coño y me hablas de mariconadas.
- Señor Jesús esto tiene que a acabar. Tenemos carne de comida. Yo mismo pesque la rata de agua esta mañana.
- ¡No jodas, Juan! Podíamos hacer una paellita como en Valencia. Yo la preparo.
- Señor Juan, no permito en mi cocina…
- Déjate de tonterías. ¡¡Paqui!! ¡Voy a preparar una paellita con carne que te vas a chupar lo dedos!
- ¿Con carne Kevin? ¿Desde cuando te...
- Espera Paqui, que esa conversación ya la conozco. Es carne de… lata. Eso es. De lata.
- Ah pues muy bien pero porque no la prepara el chino. Para eso pagamos ¿no?
- Déjate de tonterías ¿desde cuando un chino sabe hacer una paellita?
- Señor Jesús, yo cuando trabaje en España…
- Dadadadadada. Déjate de bobadas. ¿Donde esta la carne para trocearla?
- ¡Antes habrá que pelarla!
- ¡Y un huevo! Eso lo haces tu y procura que la Paqui no se entere si no quieres pasarlo mal.
- Esta bien. No puedo mas. Ve este cuchillo, pues voy ha hacer una locura. Están uds…
- ¡Paqui cuidado por dios tiene un…!
- ¡Si se mueve la mato…!
- ¡Chino de mierda, suéltame el brazo que te arranco los huevos! ¡Kevin haz algo!
- Juan, no me toques los cojones que la tenemos.
- Señor Jesús, esto es un secuestro y exijo un rescate por uds.
- Este tío es tonto. Paqui no te muevas hasta que vuelva. Voy nadando a la orilla y pediré ayuda.
- Señor Jesús: ni sabe hablar cantones ni puede llegar hasta la orilla desde aquí. Antes las sanguijuelas le chuparan la….
- Ya lo se ¡la mano!
- No. Iba a decir la piel y le dejaran sin sangre. Están en mi poder.

Intento que sonara tremendo y dramatico pero un chino que apenas se adivinaba detrás de tanta mujer, apuntando (desde abajo), con un cuchillo a los pechos de la Paqui inspiaraba mas ternura que miedo. Y ademas con esos pechos no era seguro que el cuchillo llegara muy dentro del cuerpo.

- ¿Y cuanto vas a pedir por nosotros? ¿y a quien?

11 de abril 2º parte
- Pediré al menos 20.000,00 euros. ¡Y ni uno menos!
- Juan, me estas insultando. Nos vas a secuestrar para pedir solo 20.000,00 euros. Vaya mierda de pirata. Esto pasa en cuanto sales de España. No saben ni robar como dios manda. Estoy por dejarte solo con la Paqui para que acabe contigo.
- Kevin, no seas cabronazo. ¡Dile a este tonto que me suelte!
- No hasta que suba el rescate
- Pero, pero... ¿eres tonto Kevin?
- Coño Paqui, si estoy por pagarle el rescate todos los años al chino este de los cojones!
- Señor Jesús, ¿quiere decir que podría darme esa suma todos los años y no le importaría?
- Pues claro tontolahaba. ¿Con quien te crees que tratas? Tengo mas dinero del que podría gastar en mi vida yo, mi familia, mis amigos y un bobo como tu.
¿Cómo es posible? Hu-an siente que la vida es tan injusta (con el). Para remediarlo Paqui a conseguido, por la sorpresa, soltarse de la presa de Hu-an y con habilidad le propina un rodillazo en sus partes dolorosas (las mas dolorosas) que le hace soltar el cuchillo, dos gruesas lagrimas y un grito que resuena en medio del río como si fuera el autentico monstruo del lago Ness. Paqui con una mano le deja claro a su marido que este episodio ha acabado y con la otra le retuerce un pezón a Hu-an que no sabe que dolor atender. En voz baja el pobre hombre trata de defenderse:
- Señora Paqui, si no me suelta le contare a su marido lo de la otra noche.
- Y que le vas a contar chino tonto. ¿Que casi echamos un polvo?
- ¿Como casi?
- Joder Hu-an, casi ni lo note.
- Eso duele mas que el pellizco. No mas que el rodillazo porque eso duele mucho pero me deja sin hombría. Yo di todo de mi.
- Todo de ti es poco para mi. Si eso es cierto, yo con tu pirindola hago preliminares y luego los aparco para follar con herramientas mejores, porque una cosa te digo: no se donde llegaras con "eso" pero conmigo te has quedado en la entrada. Si fuera por ti seguiria siendo virgen. Con la grima que me da.
- Uds los occidentales solo quieren penetrar, penetrar y penetrar.
- Callate que me pones caliente. Y si se ocurre decirle algo al señor Jesús, te juro que comemos chino para la cena. Después de que casi me violas...
- Pero si fue ud la que me sedujo y me provoco diciendo que le enseñara comó se jugaba con las bolas chinas!
- Pero callate idiota que nos va a oir...
- Paqui ¿te ayudo?
- No hace falta corazón, voy abajo con este tonto a curarle los cojones, creo que me he pasado al pegarle.
- Ay Paqui con esas piernas, no me extraña. Pues no te vas a creer que me has puesto palote con el rodillazo? En cuanto acabes con este tonto tu yo vamos a hacer el homenaje a la bandera.
- Ni lo sueñes. Después tendré que lavarme.
- Pero que dices Paqui?
- Quiero decir... que con este jaleo estoy sudando y mejor me lavo antes de empezar contigo.
- Que raro hablas Paqui, no hay quien te entienda.
- (Ya me entiendo yo. Cuando se lo cuente a la Sole y a RaRa no se lo van a creer.) Vamos abajo chino del carajo. Déjame que toque para ver si los tienes inflamados. ¡Huy por dios! Vamonos corriendo. No. Borra eso. Ni se te ocurra hasta que yo te diga.
- Por los dioses señora Paqui, están así de dolor. No creo que pueda...Y luego mi esposa: que diría si nos viera.
- Tu eres tonto. ¿Crees que estará esperándote cruzada de piernas durante tanto tiempo?
- ¿Qué quiere decir? Ella seria incapaz, no podría... ¡es mi esposa!
- Mira que sois tontos. Antes de nada es una mujer. y cállate de una vez. Si te duele me lo dices y soplo. Dios que espectáculo...

2 comentarios:

  1. este diario a bordo que no se pare por dios!! o tendré que hablar con el chino!! fuente inagotable de historias.....que lleguen siempre a los oidos de algun delfín, aunque este en otros mares.....comiendo Koushi. ;))

    ResponderEliminar
  2. cuando vuelvas de otros mares y antes de que acabes harta por ahi, podriamos comernos algo juntos. te ape delfin?

    ResponderEliminar